La Corriente Federal de Trabajadores de la CGT, luego de realizar distintos encuentros de organizaciones sindicales para analizar la actual situación, caracterizada por un violento ataque contra los ingresos alimentarios y el empleo de los trabajadores, activos y jubilados, con o sin empleo, en el marco de un creciente deterioro de la situación económica y social, cree oportuno reiterar que:
Su compromiso es con la unidad, sin exclusiones, del movimiento sindical en la Confederación General del Trabajo alrededor de un programa de propuestas y acciones para superar esta crítica situación.
No puede persistir el actual estancamiento institucional de la Confederación General del Trabajo. Es necesario que su actual Consejo Directivo adopte con urgencia decisiones coherentes, acudiendo a la consulta de los ámbitos orgánicos estatutarios que corresponden: el Comité Central Confederal cuyos mandatos no pueden dejar de cumplirse, y de ser necesario su Congreso. Con dolor, debemos advertir que no está cumpliendo con sus obligaciones, lo que afecta tanto la defensa de los derechos de los trabajadores, como los principios fundacionales de unidad, solidaridad y organización.
Sin cejar en su esfuerzo de unidad en la CGT, coherente con los lineamientos expresados en las multitudinarias manifestaciones de los trabajadores del 29 de noviembre, 14 y 18 de diciembre, del 21 de febrero, así como con el ejemplo dado por las trabajadoras el 8 de marzo, seguirá confluyendo con aquellas organizaciones que dan batalla a las políticas de este Gobierno de los ricos contra los pobres.
Con el fin de preservar sus objetivos fundacionales, la Corriente Federal de Trabajadores no participa de la creación de ningún nuevo nucleamiento gremial ni es apéndice o rama sindical de formación partidaria alguna.
No es hora de más divisiones o subdivisiones, sino de unidad, solidaridad y organización para enarbolar alto la bandera de la justicia social y defender el interés nacional. No se puede seguir así.
La definición de un programa claro y concreto, con objetivos adecuadamente planificados, es nuestra exigencia irrenunciable previa a cualquier acuerdo tanto dentro de la Confederación General del Trabajo, que debe abrir sus puertas a todas las organizaciones sindicales sin exclusiones, como para la construcción de acuerdos políticos e institucionales para superar la actual situación. Para ello ofrece su programa de 27 puntos.
Advertimos, por último, que no aceptamos que el Movimiento Sindical siga siendo excluido a la hora de las grandes decisiones nacionales. Siempre que esto último ocurrió, como estamos comprobando, el Pueblo fue derrotado.